Se llamaba (...) y una
gota de sudor frío recorría su frente. Sobre la postergación indefinida, casi
infinita, como una recta paralela a la vida y que nunca se corta, de las causas
que tejían los sucesos futuros y futuribles. Las acciones posibles o probables
volteaban su cabeza, las probabilidades reventaron su alma opaca. Perdido. Quizás
si moviera un dedo, (...) sería el nuevo instigador de las masas,
alzando su puño. Tal vez un mendigo mirando de cara al olvido si se frotara la
mejilla derecha. Rascarse la nariz lo convertiría seguramente en un héroe de la
música. Un escéptico enclaustrado filósofo, combatiente inamovible por el
triunfo de lo realmente valioso, aguardaba manifestarse en el lóbulo de la
oreja derecha.
Un respiro, permitiéndole ignorar
momentáneamente las catastróficas consecuencias sucesorias, le proporcionó
alivio suficiente para hacer descansar su mente. Meterse las manos en los
bolsillos y sentarse en el suelo. Escuchar como le acariciaba el viento y
cantar una canción de amor al oído del tiempo. Quizás, haciendo eso solo sería (...).
-Yo, (...) , vagando y saltando por los hilos de las causas, he
decidido renunciar a cualquier tipo de responsabilidad que se me atribuya por
la decisión que fuere. Me limitaré a no atender a las consecuencias de mis
actos, no haciendo nada si así lo considero oportuno o haciéndolo todo si así
fuere mi deseo.-
El peligroso poder que encierra ser elevado a la categoría de ídolo de masas. O esa, al menos, es mi interpretación. Aunque, ¿a quién le importa lo que yo haya interpretado? Un abrazo, Tomeu.
ResponderEliminarToda interpretación vale! :D Más bien lo que quiero decir es que la sociedad siempre asigna roles y tú tienes que asumirlos, tener un papel en ella, un trabajo, ser productivo... Blablabla. Un abrazo!
ResponderEliminarNada mejor como un respiro en el momento adecuado. Por ejemplo, éste.
ResponderEliminar¡Abrazos!
Primero hay que encontrarse a uno mismo. Pero eso se logra metiéndonos dentro de nosotros, no mirando hacia fuera. La libertad se logra desde dentro hacia fuera. Totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarUn saludo.